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Las lentes multifocales intraoculares permiten la corrección simultánea de las cataratas y los defectos refractivos.

Las cataratas y su tratamiento

El cristalino es la lente natural del ojo, y en su estado normal es transparente. Las cataratas son una afección ocular por la que nuestro cristalino se vuelve opaco con el paso de los años y nos impide ver correctamente.

Para el tratamiento de las cataratas es necesario extraer el cristalino opacificado y sustituirlo por otra lente artificial, llamada lente intraocular.

Las lentes intraoculares

La lente intraocular es aquella que se introduce en el interior del ojo para sustituir el cristalino que se ha vuelto opaco (en el caso del tratamiento de cataratas).

Las lentes intraoculares pueden ser monofocales o multifocales:

  • Las lentes monofocales ofrecen un solo punto de enfoque. Es decir, si se introduce una lente monofocal que corrija la visión lejana pero el paciente sufre también vista cansada, tendrá que seguir utilizando gafas para ver de cerca.
  • Las lentes multifocales ofrecen varios puntos de enfoque, corrigiendo la visión a todas las distancias (cercana, intermedia y lejana). Es decir, el paciente podrá corregir en la misma intervención de cataratas su problema de miopía, hipermetropía, astigmatismo o vista cansada.

Ventajas de las lentes multifocales intraoculares

Las lentes multifocales o de última generación ofrecen una serie de ventajas con respecto a las lentes monofocales.

En primer lugar, devuelven la visión a todas las distancias:

  • Cercana: utilizada en tareas que se focalizan en objetos cercanos como leer, coser, etc.
  • Intermedia: actualmente se le dota de gran importancia, ya que es la que empleamos para trabajar con el ordenador, mirar el móvil o la tableta, etc.
  • Lejana: es la que se usa cuando observamos objetos situados a más de 6 metros. Por ejemplo, cuando conducimos.

Esto significa que, si a la hora de someterse a una intervención de cataratas se sufren otros defectos de refracción (como la vista cansada, la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo), estos se pueden solucionar en el mismo procedimiento implantando una lente intraocular multifocal.

Además, son lentes personalizadas que ofrecen una alta calidad de visión y eliminan la necesidad de utilizar otros sistemas de corrección óptica como las gafas o las lentillas.

De cualquier modo, la elección de la lente más adecuada para cada caso particular deberá estar en manos del oftalmólogo, quien valorará la mejor opción en función de las características únicas de cada ojo.

 

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