Si quieres acabar con las patas de gallo o las arrugas en la zona de los ojos descubre la eficacia del bótox como tratamiento para rejuvenecer la mirada, de la mano del Dr. Scott Anderson García, especialista en Oculoplastia de Oftalmedic Salvà.
El contorno de los ojos es la zona más delicada del rostro. Al igual que el resto del cuerpo, también sufre los efectos del envejecimiento natural. Con el paso de los años, la piel va perdiendo flexibilidad y firmeza y van apareciendo las conocidas como arrugas de expresión. En concreto, en esta región, este fenómeno se manifiesta mediante la aparición de las temidas patas de gallo y de las arrugas entre las cejas y en la frente.
La aparición de estos signos de la edad no supone ningún problema de salud. Sin embargo, en ocasiones aporta un aspecto envejecido al rostro que, para muchas personas, es verdaderamente molesto. Descubre la eficacia del bótox para el tratamiento de las patas de gallo y las arrugas en la zona periocular.
Gracias al tratamiento con toxina botulínica es posible restar años a la mirada en tan solo unos minutos, sin recurrir a la cirugía. El Dr. Scott Anderson García, especialista en Oculoplastia de Oftalmedic Salvà, explica el funcionamiento de esta técnica para el tratamiento de las arrugas de los ojos, “que aporta resultados evidentes, pero muy naturales”.
Patas de gallo: tratamiento con bótox
Para atenuar de manera satisfactoria las patas de gallo y las arrugas que se manifiestan en el tercio superior del rostro por la gesticulación, y lucir un aspecto más rejuvenecido sin necesidad de cirugía, se puede recurrir al tratamiento con bótox. De acuerdo al Dr. Scott Anderson, “este tratamiento estético permite al paciente recuperar una piel tonificada y tersa, revitalizando la expresión de su rostro”.
Cabe destacar que, para lograr resultados excelentes y seguros para el paciente, es fundamental ponerse en manos del oftalmólogo especializado en Oculoplastia. Además de proporcionar la solución estética más adecuada, este aportará un profundo conocimiento de la anatomía ocular y de su funcionalidad, garantizando el máximo cuidado de la salud visual.
¿En qué consiste?
Este tratamiento consiste en “la infiltración de un medicamento compuesto por una proteína natural, que actúa inhibiendo la contracción muscular de manera controlada y temporal. Gracias a la relajación del músculo tratado, se consigue reducir la aparición de las arrugas que suman años a la mirada, al tiempo que se conserva la expresividad facial”, tal como explica el Dr. Scott Anderson García.
Se trata de una técnica que se aplica en la misma consulta, sin anestesia, y de un modo sencillo y rápido -en tan solo unos minutos-, que retorna a la piel su firmeza, devolviendo la juventud a la mirada y al rostro del paciente.
Resultados
Los resultados de la infiltración de bótox se hacen evidentes a los pocos días y se mantienen durante varios meses. El objetivo es reducir al máximo la formación de arrugas y atenuar las ya existentes, con tal de lograr un aspecto lo más natural posible. Un aspecto no forzado, pero que aporte una mirada rejuvenecida.
Transcurrido este tiempo, el músculo recobra su función y puede volver a producir arrugas. Por esta razón, el Dr. Scott Anderson García, especialista de Oftalmedic Salvà, recomienda repetir su aplicación cada cierto tiempo. Siempre con moderación y atendiendo a las indicaciones del oftalmólogo especializado en Oculoplastia, que garantizará siempre el mejor cuidado de la salud ocular del paciente.
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