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Degeneración Macular Asociada a la Edad: La Dra. Teresa Salvà, especialista de Oftalmedic Salvà, explica en qué consiste esta enfermedad y cómo evitar la pérdida irreversible de visión

La Degeneración Macular Asociada a la Edad (DMAE) constituye la primera causa de ceguera legal en mayores de 65 años en los países desarrollados y, en España, afecta ya a más de 700.000 personas. El diagnóstico y el tratamiento precoz son de vital importancia para evitar la pérdida de visión derivada de esta enfermedad. Por este motivo, la Dra. Teresa Salvà Palomeque, especialista en glaucoma, retina médica y tratamiento de cataratas de Oftalmedic Salvà, recomienda las revisiones oftalmológicas preventivas a partir de los 50 años de edad.

¿Qué es la DMAE?

Tal como explica la Dra. Teresa Salvà, la DMAE es una patología crónica, degenerativa e irreversible que afecta a la mácula (la zona central de la retina).

Existen dos tipos de DMAE:

  • Seca o atrófica: se desarrolla de forma lenta y genera una pérdida de visión gradual. Es la forma más común y surge por el envejecimiento de la mácula.
  • Húmeda o exudativa: progresa rápidamente y la pérdida de visión se manifiesta en pocas semanas. Esta forma de DMAE se da cuando se forman vasos sanguíneos anómalos debajo de la retina (que pueden producir filtración de fluidos y sangre) y es la causante del 90% de los casos de pérdida de visión central severa.

Las personas que padecen DMAE seca deben controlar constantemente su visión central (para ello pueden utilizar la rejilla de Amsler) y acudir al oftalmólogo si notan cualquier cambio en ella, ya que la DMAE seca puede transformarse en húmeda e incrementar su gravedad.

Síntomas

Los síntomas de esta enfermedad ocular pueden variar en función de cada persona y de lo avanzada que se encuentre, aunque se pueden establecer algunos indicativos generales:

  1. Zona central de la visión borrosa.
  2. Distorsión de líneas y objetos.
  3. Dificultad para realizar tareas cotidianas como leer, conducir, etc.
  4. Mayor sensibilidad ante los destellos de luz.
  5. En casos avanzados, pérdida permanente de la visión central.

En general, la pérdida de visión derivada de la DMAE comienza en un solo ojo y es frecuente que posteriormente afecte también al otro ojo. Sin embargo, muchas personas no se dan cuenta de que sufren esta patología hasta que el segundo ojo ya está afectado y la pérdida de visión ya es severa e irreversible. Por ello, el diagnóstico y el tratamiento precoz son claves en el pronóstico y la evolución de la DMAE.

Factores de riesgo

Aunque hoy en día no se conocen las causas específicas de esta afección, sí hay algunos factores que predisponen la aparición de la DMAE, como la edad avanzada, el sedentarismo asociado a sobrepeso, el tabaquismo o la herencia genética.

Tratamiento

De acuerdo a la Dra. Teresa Salvà, el diagnóstico temprano de la DMAE es primordial a la hora de aplicar un tratamiento, ya que si se detecta en sus fases iniciales es más posible lograr un control de la patología, reducir sus complicaciones e incluso mejorar la Agudeza Visual del paciente.

Con respecto a la DMAE seca, únicamente se puede actuar de forma preventiva mediante antioxidantes específicos para la retina. Por tanto, los tratamientos actuales se centran en combatir la forma húmeda de la DMAE:

  • La inyección intravítrea de fármacos antiangiogénicos bloquea el crecimiento de vasos sanguíneos anómalos. Se trata de un tratamiento ambulatorio que se realiza bajo anestesia tópica y que requiere establecer una pauta muy estricta de seguimiento del paciente.
  • En algunos casos será necesario recurrir a la fotocoagulación directa con láser.

La elección del tratamiento más apropiado dependerá de cada caso particular y este deberá ser personalizado, teniendo en cuenta todos los factores de riesgo de cada paciente, el estado de la enfermedad, la necesidad de un tratamiento a largo plazo, la accesibilidad a la medicación, etc.

En cualquier caso, el tratamiento puede detener la pérdida de visión, pero difícilmente recuperar la visión perdida. Por este motivo, la Dra. Teresa Salvà, especialista de Oftalmedic Salvà, insiste en la importancia de los controles oftalmológicos periódicos a partir de los 50 años de edad, puesto que el diagnóstico y el tratamiento precoz pueden evitar en muchos casos que la enfermedad acabe derivando en ceguera irreversible.

La rejilla de Amsler

rejilla de amsler

REJILLA DE AMSLER. Tápese un ojo y mire el punto central de la rejilla (a una distancia de unos 30 cm). Repita el procedimiento con el otro ojo (si usa gafas o lentillas, realice la prueba con ellas puestas). Si ve las líneas de alrededor del punto deformadas u onduladas, su mácula podría estar afectada. Oftalmedic Salvà le recomienda que acuda de inmediato a un especialista.

 

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